La metodología para valorar hoteles se inicia determinando el “open market value” del sujeto a valorar, como el precio más probable que resultase en una compraventa entre un comprador y un vendedor independientes, normalmente motivados, en ausencia de información privilegiada y actuando ambas partes con prudencia y sin coacción.
Transformación de edificios no hoteleros en hoteles y viceversa: Un modelo matemático.
En la ciudad de Barcelona, la oferta hotelera ha ido creciendo de forma sostenida en las dos últimas décadas, movida en especial por el crecimiento de la demanda de alojamiento y la consolidación de Barcelona como destino turístico. La mayor parte de este crecimiento se ha producido en zonas de nuevo desarrollo (frente marítimo, 22@, Diagonal-Fórum, recintos feriales…) y se ha materializado en edificios de nueva construcción de gran capacidad cada uno de ellos. A partir del año 2000 se observa la proliferación de nuevos establecimientos en los distritos más céntricos de la ciudad, particularmente en Ciutat Vella. Se trata, en general, de establecimientos mucho más pequeños (50-100 habitaciones) fruto de la transformación de edificios no hoteleros. En particular a partir de 2007, y como resultado de la crisis del mercado inmobiliario residencial, esta tendencia se acelera, hasta el punto de que el Ayuntamiento decide promulgar en 2010 el “Pla d’Usos de Ciutat Vella (PUCV)”, retocado en 2013, para proteger ese distrito particularmente vulnerable.